Israel amenaza con más agresiones y acusa a Hamás de violar tregua pese a más de 500 incumplimientos
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, afirmó que Israel continuará sus operaciones en varios frentes, mientras se acusa a Hamás de un incidente en Rafah que dejó un oficial herido, pese a que Israel habría violado la tregua más de 500 veces.
Israel volvió a elevar el tono amenazante sobre sus agresiones regionales en un contexto de crecientes tensiones en Gaza. Mientras anuncia la continuidad de sus operaciones militares en varios frentes, Tel Aviv acusó a Hamás de violar el alto el fuego tras una explosión en Rafah que dejó un oficial israelí herido. El grupo palestino negó su implicación, afirmó que el incidente ocurrió en una zona bajo control israelí y denunció que es Israel quien incumple la tregua.
Las advertencias israelíes se produjeron durante un curso de entrenamiento para pilotos de la Fuerza Aérea, donde el ministro de Defensa, Israel Katz, afirmó que Israel “seguirá con sus operaciones en Líbano, Siria, Gaza y Yemen”. Las declaraciones, recogidas por el diario Maariv, se produjeron en un acto al que asistieron también el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y el jefe del Estado Mayor del Ejército, Eyal Zamir.
En ese marco, Katz desglosó la postura israelí en cada uno de los frentes: “En Líbano, seguiremos aplicando la máxima fuerza contra Hezbollah; en Siria, Israel no se retirará del monte Hermón (Yabal Al-Sheij) ni de la zona de seguridad; y en Gaza, Israel mantiene su compromiso de desmantelar a Hamás y desarmar el territorio”.
Asimismo, el ministro se refirió al frente yemení y subrayó que “en cuanto a Yemen, Israel continuará sus operaciones para impedir que los hutíes refuercen sus capacidades”.
Por otra parte, al aludir a las tensiones con Teherán, Katz afirmó que Israel ha infligido “daños significativos a las capacidades nucleares y estratégicas de Irán”. En ese sentido, añadió: “Estoy siguiendo los informes relativos a Irán, al que golpeamos con contundencia en cooperación con nuestros socios estadounidenses, y el estamento de seguridad está supervisando de cerca los acontecimientos. Naturalmente, no puedo ofrecer más detalles”, concluyó.
Israel acusa a Hamás tras explosión en Rafah que deja un oficial herido
Mientras Katz realizaba estas declaraciones, el Ejército israelí informó de que un oficial resultó herido por la detonación de un artefacto explosivo en Rafah, un incidente que volvió a tensar la frágil tregua en Gaza. Poco después, el primer ministro, Benjamín Netanyahu, responsabilizó al grupo de resistencia palestino Hamás por lo ocurrido.
Según un comunicado militar, “este miércoles, un dispositivo explosivo detonó contra un vehículo blindado durante una operación destinada a despejar la zona de Rafah”. “Como resultado, un oficial de campo sufrió heridas leves y fue trasladado al hospital para recibir tratamiento”, añadió el Ejército.
En respuesta al incidente, la oficina del primer ministro emitió un comunicado en el que prometió “responder” a lo que calificó como “una violación del alto el fuego por parte de Hamás”. Además, acusó al grupo palestino de “seguir incumpliendo el alto el fuego y el plan de 20 puntos del presidente estadounidense Donald Trump”.
El comunicado subrayó que “la negativa pública y persistente de Hamás a desarmarse constituye una violación flagrante y continua”, y sostuvo que “sus intenciones violentas quedaron confirmadas hoy al detonar un artefacto explosivo que hirió a un oficial del Ejército israelí”. En esa misma línea, añadió que “Hamás debe rendir cuentas por el acuerdo que firmó, que incluye su salida del poder, el desarme y la lucha contra el extremismo”, advirtiendo de que “Israel responderá en consecuencia”.
No obstante, Israel es quien viola reiteradamente el alto el fuego, según un comunicado reciente de la Oficina de Medios de Gaza, desde que entró en vigor la tregua, Israel habría violado la tregua en más de 500 ocasiones. En ellas, 411 palestinos han muerto y otros 1.112 han resultado heridos como consecuencia de ataques israelíes.
Hamás niega acusaciones
En respuesta a las acusaciones israelíes, Hamás negó cualquier responsabilidad en la explosión y reclamó que Tel Aviv sea obligado a cumplir los acuerdos firmados, en lugar de “fabricar justificaciones” para prolongar la escalada militar.
En un comunicado, el grupo de resistencia afirmó que “la explosión registrada en la zona de Rafah ocurrió en un área completamente controlada por las fuerzas de ocupación sionistas, donde no hay presencia de palestinos”. Asimismo, recordó que había advertido previamente sobre la existencia de restos de munición sin detonar en esa región y en otras áreas.
En ese contexto, Hamás subrayó que no es responsable de esos artefactos desde el inicio de la implementación del acuerdo, “especialmente de aquellos plantados por la propia ocupación”. Por ello, instó a “obligar al Ejército israelí a implementar los acuerdos que firmó y a no fabricar pretextos para la escalada continua ni para los intentos de sabotear el acuerdo”, al tiempo que reafirmó su “compromiso con el acuerdo y con las obligaciones que de él se derivan”.
Esta posición fue reforzada por el alto dirigente de Hamás, Mahmoud Mardawi, quien señaló en una publicación en X que, a su juicio, la detonación en Rafah se debió a restos de explosivos. “Ocurrió en un área controlada por la ocupación israelí, donde ningún palestino puede estar presente”, afirmó.
71.000 muertos desde el inicio de la ofensiva
Cabe destacar que el 29 de septiembre, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció un plan de paz y alto el fuego en Gaza compuesto por 20 puntos, entre ellos la liberación de prisioneros israelíes, un alto el fuego, el desarme del grupo Hamás, la retirada de Israel de Gaza, la formación de un gobierno de tecnócratas y el despliegue de una fuerza internacional de estabilización.
El 10 de octubre entró en vigor la primera fase del acuerdo. Sin embargo, Israel violó algunas de sus disposiciones y retrasó el paso a la segunda fase, alegando que uno de sus soldados permanecería cautivo en Gaza, a pesar de que las facciones palestinas continúan buscándolo en medio de la destrucción masiva causada por el genocidio israelí.
Desde el inicio de su ofensiva en octubre de 2023, Israel ha matado a casi 71.000 palestinos, en su mayoría mujeres y niños. No obstante, diversas estimaciones advierten de que la cifra real de víctimas podría ser significativamente mayor, ya que miles de personas continúan atrapadas bajo los escombros. La ofensiva también ha dejado cerca de 171.195 heridos, muchos de ellos con amputaciones y lesiones permanentes.