¿Quién financia la expansión de los asentamientos israelíes ilegales en Cisjordania ocupada?
Empresas extranjeras, bancos, donantes y organizaciones ideológicas canalizan dinero para la expansión de asentamientos israelíes en Cisjordania ocupada, a pesar de que estos son ilegales bajo el derecho internacional, según ha advertido la ONU.
Recursos financieros: ese es el motor principal que impulsa la construcción de asentamientos de Israel y el factor clave que habilita a los colonos ilegales para atrincherarse en los territorios palestinos ocupados, especialmente en Cisjordania ocupada, incluida Jerusalén Este.
La construcción de asentamientos ilegales se intensificó inmediatamente después de la Guerra de los Seis Días en 1967, cuando Israel ocupó Cisjordania y Gaza. Sin embargo, los mecanismos detrás de la financiación para estos colonos rara vez se reporta en los medios israelíes oficiales o privados.
Hay una excepción en los presupuestos públicos que han asignado los sucesivos gobiernos en Tel Aviv para construir nuevas unidades de asentamientos ilegales, una política destinada a afianzar la ocupación de Cisjordania y a borrar su identidad palestina.
La mayoría de los movimientos y asociaciones de colonos israelíes no divulgan sus presupuestos ni sus fuentes de financiamiento extranjero. Sin embargo, algunos medios de comunicación de Israel—especialmente publicaciones de izquierda como Haaretz— y organizaciones internacionales de derechos humanos ocasionalmente publican informes que arrojan luz sobre los canales por los que fluye el dinero.
Israel ha continuado la construcción de asentamientos durante décadas, a pesar de los repetidos llamados de la ONU para detener esta práctica, que el organismo internacional denuncia como ilegal y una amenaza directa a la solución de dos Estados.
En medio de las operaciones militares que Tel Aviv ejecuta a diario en Cisjordania ocupada y de la expansión de asentamientos, la agencia de noticias Anadolu pone la lupa en el apoyo financiero internacional que impulsa este esfuerzo.
Empresas
El pasado 26 de septiembre, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos actualizó su base de datos sobre las empresas que operan en los asentamientos israelíes ilegales en Cisjordania y Jerusalén Este ocupadas.
La lista incluye un total de 158 empresas. De ellas, 138 son israelíes y las 20 restantes son compañías internacionales de Canadá, China, Francia, Alemania, Luxemburgo, Países Bajos, Portugal, España, Reino Unido y Estados Unidos.
La mayoría de las empresas extranjeras operan en los sectores construcción, bienes raíces, turismo, viajes y minería.
Estados Unidos encabeza la lista, con seis grandes firmas: Airbnb, Booking Holdings, Expedia Group, Motorola Solutions, Re/Max Holdings y TripAdvisor. Todas proporcionan servicios que van desde turismo y reservas en línea hasta comunicaciones y bienes raíces.
España tiene cuatro empresas vinculadas a la construcción, infraestructura y ferrocarril: ACS, CAF, Ineco y SEMI.
La lista también incluye a las firmas francesas de ingeniería Egis y Egis Rail, y dos empresas británicas: Greenkote P.L.C. y JCB, esta última conocida por su maquinaria pesada utilizada en proyectos de construcción.
También figuran empresas de Luxemburgo (Altice International), Países Bajos (Booking.com B.V.), Alemania (Heidelberg Materials AG), Portugal (Steconfer S.A.), China (Fosun International Ltd) y Canadá (Metrontario Investments Ltd).
Bancos
Un informe de Human Rights Watch, publicado el 28 de mayo de 2018, encontró que la mayoría de los principales bancos israelíes proporcionan servicios que apoyan, sostienen y expanden los asentamientos en Cisjordania ocupada.
Según el reporte, los siete bancos más grandes de Israel ayudan a financiar la construcción de asentamientos ilegales, a asegurar la propiedad en nuevos proyectos de construcción y a gestionar esos proyectos hasta su finalización, actividades que facilitan la reubicación de colonos israelíes en el territorio ocupado.
Estos siete bancos son: Hapoalim, Leumi, Discount, Mizrahi Tefahot, First International Bank of Israel, Union Bank of Israel y Bank of Jerusalem.
La Federación Internacional por los Derechos Humanos (FIDH), con sede en Francia, informó en marzo de 2017 que cuatro bancos y una compañía de seguros de ese país han contribuido indirectamente a la construcción de asentamientos ilegales mediante asociaciones con instituciones financieras israelíes que operan en los territorios ocupados.
Los bancos son: BNP Paribas, Société Générale, Crédit Agricole y BPCE, mientras que AXA maneja los seguros.
La FIDH señaló que estas relaciones ayudan a expandir los asentamientos y a construir unidades de vivienda exclusivamente para colonos israelíes, perjudicando los derechos económicos y sociales de los palestinos.
Grandes donaciones
A todo esto se suma que organizaciones israelíes de derecha –especialmente grupos de colonos ilegales– reciben grandes donaciones extranjeras, según un informe del diario Haaretz publicado el 7 de diciembre de 2015.
Más de 50 organizaciones judías-estadounidenses transfirieron más de 1.000 millones de shekels (alrededor de 220 millones de dólares) a colonos ilegales en Cisjordania ocupada entre 2009 y 2013.
Estas donaciones están exentas de impuestos en Estados Unidos, lo que según un informe de Globes del 2 de febrero de 2015 refleja el apoyo de Washington a la actividad de asentamientos.
Ahora bien, el financiamiento no se limita a la construcción de asentamientos: cantidades significativas apoyan la educación religiosa extrema, como la escuela Neve Shmuel en el asentamiento de Efrat, y asisten a familias de colonos ilegales condenados por ataques contra palestinos, según el reporte.
Entidades e individuos
Entre los principales donantes extranjeros están el Central Fund of Israel, con sede en Manhattan, y el Hebron Fund en Brooklyn, que transfirieron alrededor de 4,5 millones de dólares a los asentamientos de Hebrón entre 2009 y 2013, según Haaretz.
Otros organismos de financiamiento importantes, de acuerdo a un informe de Israel Hayom del 31 de diciembre de 2020, incluyen a Keren Hayesod, que tiene actividades en 45 países y fue establecido por la Organización Sionista Mundial para recaudar dinero destinado a proyectos sionistas como la inmigración judía y la construcción de asentamientos.
También están involucrados la Agencia Judía, Friends of the Israel Defense Forces (el ejército israelí) en Miami, el Fondo Europeo de Desarrollo Judío y la Fundación Ruth Bat Sarah, respaldada por el multimillonario estadounidense Ira Rennert.
Entre 2006 y 2013, la organización Friends of Ir David, cuya sede está en Estados Unidos, donó por sí sola alrededor de 122 millones de shekels (unos 31,6 millones de dólares), según informó Haaretz el 6 de marzo de 2016.
Además, el financiamiento no se limita a judíos estadounidenses. Donantes adinerados de múltiples países también contribuyen, como a Roman Abramovich, el expropietario del Chelsea Football Club, quien tiene vínculos con el Consejo Yesha (consejo municipal de asentamientos judíos en Cisjordania ocupada) y la asociación extremista Elad.
Asociaciones israelíes
Justamente, uno de los grupos de colonos ilegales más prominentes que recibe fondos extranjeros es Elad, fundado por David Be'eri en septiembre de 1986.
Israel Hayom informó el 31 de diciembre de 2020 que contar con amplios fondos le permitió a Elad remodelar partes de la Ciudad Vieja en Jerusalén Este ocupada.
Los palestinos consideran a Jerusalén Este ocupada como la capital de su futuro Estado, basándose en resoluciones internacionales que no reconocen la ocupación israelí de 1967 ni su anexión de 1980.
Be'eri se educó en instituciones religiosas y de asentamientos ilegales como Bnei Akiva y Ateret Cohanim, que fomentan la inmigración judía a Jerusalén y la expansión de colonos en los territorios ocupados.
Entre 2006 y 2013, Elad recibió alrededor de 450 millones de shekels (125 millones de dólares), informó Haaretz el 6 de marzo de 2016.
La organización a menudo reporta fuentes de este dinero como "desconocidas", en violación de la ley israelí, y las autoridades fiscales no han aplicado los requisitos de transparencia.
Más de la mitad de este financiamiento provino de lugares con bajo control fiscal como Bahamas, las Islas Vírgenes y Seychelles, sin claridad sobre los verdaderos donantes, apuntó Haaretz.
Por su parte, el diario Globes informó el 2 de febrero de 2015 que Elad recibió 6,9 millones de dólares en 2011 y 5,6 millones de dólares en 2012.
Entre 2000 y 2010, aproximadamente 40 organizaciones donaron 200 millones de dólares a los asentamientos ilegales.
En 2022, Elad recibió 28 millones de shekels (alrededor de 8,3 millones de dólares) del gobierno israelí para apoyar sus proyectos de asentamiento y judaización en Wadi al-Rababa en Silwan, al sur de la Mezquita de Al-Aqsa, según un informe de Haaretz del 22 de noviembre de 2022.
Los organismos de financiamiento incluyeron el Ministerio de Jerusalén y Patrimonio, la Municipalidad de Jerusalén y la Autoridad de Desarrollo de Jerusalén.
Donantes judíos estadounidenses
El 2 de marzo de 2016, el Canal 10 de Israel instó a los grupos de extrema derecha a ayudar a los "reformadores" judíos estadounidenses para asegurarse de que continúen enviando donaciones. El canal señaló que una gran parte de los fondos que apoyan a los judíos israelíes proviene de comunidades judías estadounidenses.
Las donaciones también apoyan a individuos y organizaciones condenados por ataques terroristas contra palestinos, informó Haaretz el 7 de diciembre de 2015.
Entre los beneficiarios se encuentran Ami Popper, quien mató a siete trabajadores palestinos en 1990, y el grupo Bat Ayin, cuyos miembros intentaron bombardear una escuela de niñas palestinas en Jerusalén Este ocupada en 2002.
Aumento de crímenes
El número de colonos israelíes ilegales en Cisjordania ocupada ha superado los 730.000, un aumento del 8% respecto al año pasado, según el grupo israelí de derechos humanos B'Tselem en un informe de mayo de 2025.
Durante los más de dos años de la ofensiva genocida de Israel –que ha matado a más de 70.000 personas en Gaza, la mayoría mujeres y niños–, la violencia de colonos ilegales y militares israelíes contra los palestinos se ha intensificado en toda Cisjordania ocupada, incluyendo el desplazamiento de población y la expansión de asentamientos.
Funcionarios palestinos advierten que estas acciones están sentando las bases para la anexión de Cisjordania ocupada, poniendo fin efectivamente a la posibilidad de una solución de dos Estados delineada en las resoluciones de la ONU.
Más de 1.076 palestinos han sido asesinados y 10.700 otros heridos en ataques del ejército israelí y colonos ilegales en el territorio ocupado desde octubre de 2023. Más de 20.500 personas también han sido arrestadas.
Según la Comisión de Resistencia a la Colonización y el Muro, los colonos israelíes ilegales han llevado a cabo 7.154 ataques contra palestinos y sus propiedades en Cisjordania ocupada durante el mismo período.
En un fallo histórico en julio de 2024, la Corte Internacional de Justicia declaró ilegal la ocupación israelí del territorio palestino y pidió la evacuación de todos los asentamientos en Cisjordania y Jerusalén Este ocupadas.