Crece la presión contra Netanyahu en Israel, luego de que pidiera indulto en casos de corrupción
Cercado por varios casos de corrupción en su contra, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, solicitó formalmente el indulto presidencial. Sin embargo, la indignación no tardó en manifestarse en protestas.
En una escena que reflejó el creciente rechazo hacia el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, las calles de Tel Aviv se llenaron de manifestantes que denunciaron lo que consideran su último intento por evadir la justicia. Cercado por tres casos de corrupción, Netanyahu pidió este domingo un indulto presidencial para frenar el avance del juicio que podría derivar en su condena. La solicitud, presentada sin la confesión que exige la ley, desató indignación y reavivó el debate sobre el desgaste institucional del país bajo su liderazgo.
Netanyahu, cuyo juicio comenzó el 24 de mayo de 2020, se convirtió en el primer jefe de gobierno israelí en ejercicio en sentarse en el banquillo como acusado en un proceso penal, un hecho que marcó un precedente en la historia del país. Según la legislación israelí, el presidente puede indultar o conmutar sentencias tras evaluar la información y las recomendaciones de las autoridades competentes, como los ministerios de Justicia y Defensa. Esa decisión recae ahora en Isaac Herzog, actual jefe de Estado. Sin embargo, la ley exige que cualquier solicitante admita su culpabilidad antes de recibir un indulto, requisito que Netanyahu no cumplió.
En una carta citada por el diario israelí Yedioth Ahronoth, Netanyahu afirmó: “A pesar de mi interés personal en celebrar el juicio y demostrar mi inocencia hasta una absolución total, creo que el interés público dicta lo contrario”.
Luego, en un video, el primer ministro destacó los "enormes retos" a los que se enfrenta el país y afirmó: "La continuación del juicio nos está desgarrando por dentro, provocando profundas divisiones e intensificando las fracturas".
"Estoy convencido, como muchos otros en el país, de que la finalización inmediata del juicio contribuirá en gran medida a calmar las tensiones y a promover la reconciliación general que nuestro país tanto necesita", prosiguió. Además, sostuvo que “poner fin al juicio ayudará a reducir la intensidad de las llamas en el debate que se ha generado en torno a él”.
Tras recibir la petición formal, la Oficina del Presidente informó que el caso será remitido al Departamento de Indultos del Ministerio de Justicia para recopilar las opiniones pertinentes, las cuales serán evaluadas antes de que Herzog tome una decisión final. “La Oficina del Presidente reconoce que se trata de una solicitud excepcional con implicaciones significativas, y el presidente la examinará una vez reciba todas las valoraciones”, indicó el comunicado.
La solicitud llega después de que, en septiembre, Herzog insinuara que podría considerar un indulto al admitir en una entrevista en la radio del ejército que el juicio del primer ministro “pesa mucho sobre la sociedad israelí”. También se presenta pocos días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidiera públicamente a Herzog que le conceda el perdón.
Protestas se extienden por Tel Aviv
Tras conocerse la solicitud, decenas de israelíes se concentraron frente a la casa de Herzog para exigir que rechace el pedido, mientras figuras de la oposición también alzaban la voz. El líder opositor Yair Lapid instó al presidente a negar cualquier indulto si Netanyahu no reconoce culpabilidad, expresa arrepentimiento y abandona de inmediato la vida política. En la misma línea, Yair Golan, jefe del partido de izquierda Demócratas, afirmó: “Sólo los culpables buscan perdón”.
Mientras, frente a la casa de Herzog, los manifestantes portaban pancartas que responsabilizaban a Netanyahu de la crisis política que atraviesa el país y coreaban: “Tú eres el líder, tú eres el culpable”. A la protesta acudieron también varios legisladores opositores, según informó The Times of Israel, entre ellos Naama Lazimi, diputada del parlamento israelí, llamado Knesset.
La movilización se celebró bajo el lema “Indulto = República Bananera”, con varios asistentes situados detrás de una pila de bananas coronada por un cartel con la palabra “indulto”, una referencia satírica a la solicitud presentada por Netanyahu.
“Estamos aquí para explicarle a Herzog que no vamos a aceptar esto. Debe mantenerse firme por nosotros, por nuestros hijos y por el curso de la historia”, afirmó por su parte Shikma Bressler, una activista de la oposición presente en la protesta, a la agencia de noticias EFE.
Acusado de corrupción y de crímenes contra la humanidad
Lejos de ser una disputa legal aislada, Netanyahu arrastra tres causas judiciales que, consideradas en conjunto, dibujan un potencial patrón de abuso de poder. La primera es el llamado Caso 1000, que detalla cómo él y su esposa Sara habrían aceptado lujosos regalos como puros, champán o joyas de empresarios por valor de 260.000 dólares a cambio de favores personales, un comportamiento que evidencia el uso de su cargo para beneficios privados.
A este expediente se suma el Caso 2000, que revela presuntas negociaciones con el editor de Yedioth Ahronoth, Arnon Mozes, destinadas a garantizar una cobertura mediática favorable.
De manera similar, el Caso 4000 expone cómo Netanyahu habría favorecido al propietario de la empresa de telecomunicaciones Bezeq, Shaul Elovitch, mediante decisiones regulatorias beneficiosas a cambio de un trato positivo en el portal de noticias israelí Walla. En conjunto, estos casos retratan a un primer ministro que utiliza los recursos del Estado para reforzar su posición política.
A sus 76 años, Netanyahu es el primer ministro que más tiempo ha gobernado Israel, con más de 18 años acumulados en el cargo desde 1996. Además, ha confirmado su intención de presentarse a las elecciones previstas para antes de que finalice 2026.
En los últimos años, Netanyahu ha planteado un proyecto que quedó en el centro de la polémica: una reforma judicial que, según sus críticos, buscaba debilitar a los tribunales. Esta iniciativa provocó protestas masivas que solo cesaron con el inicio del brutal genocidio en Gaza.
Sin embargo, los señalamientos en su contra no se limitan a la corrupción. Fuera de Israel, Netanyahu también enfrenta acusaciones de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. La Corte Penal Internacional emitió órdenes de arresto contra él y contra su exministro de Defensa Yoav Gallant en noviembre de 2024, responsabilizándolos directamente de las atrocidades cometidas en Gaza.