¿Amenaza EE.UU. a Colombia? Trump insinúa opción de ataques y Petro alerta que "es declarar guerra”

En lo que ha llamado su ofensiva contra las drogas, el presidente de EE.UU., Trump, dijo que Venezuela no es el único país que "está sujeto a ataques", y mencionó directamente a Colombia. Desde Bogotá, Petro lo invitó a conocer la lucha antidrogas.

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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reúne con su gabinete en la Sala del Gabinete de la Casa Blanca en Washington. / EFE

Después de varios meses defendiendo la presión militar sobre Venezuela por lo que ha llamado su lucha contra el narcotráfico, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha puesto ahora a Colombia en la mira por la misma razón. Al señalar que este país “produce cocaína” y “tiene plantas de fabricación”, el mandatario añadió que “cualquiera que haga esto está sujeto a ataques”. Desde Bogotá, el presidente colombiano, Gustavo Petro, advirtió que amenazar la soberanía de su país podría dañar las relaciones diplomáticas “de dos siglos” y “es declarar guerra”. Entonces, invitó a Trump a visitar la nación para mostrarle cómo su gobierno ha destruido los laboratorios de cocaína “sin misiles”.

"He oído que Colombia, el país de Colombia, produce cocaína. Tienen plantas de fabricación, ¿de acuerdo? Y luego nos venden cocaína. Pero sí, cualquiera que haga eso y la venda a nuestro país está sujeto a ataques, no necesariamente solo Venezuela", lanzó Trump este martes en una rueda de prensa tras una reunión de gabinete en la Casa Blanca. 

Estas declaraciones extienden la magnitud de las acciones que el Gobierno de Trump estaría planeando emprender y que, hasta este momento, se habían concentrado principalmente en Venezuela. Este país, que denunció llevar 22 semanas sometido a un “terrorismo psicológico”, ha sido el blanco predilecto de Trump para enfilar su ofensiva contra los carteles de la droga. De hecho, antes de insinuar que Colombia sería un posible objetivo, el presidente estadounidense confirmó que “muy pronto” comenzarán también los ataques terrestres. 

“Vamos a  empezar a realizar esos ataques en tierra. Ya saben, en tierra es mucho más fácil, mucho más fácil, y conocemos las rutas que toman (los “narcotraficantes”). Lo sabemos todo sobre ellos, sabemos dónde viven, sabemos dónde viven los malos, y vamos a empezar eso muy pronto también", aseveró el mandatario. Desde la semana pasada, Trump había advertido que sus Fuerzas Armadas estaban próximas a actuar en tierra contra supuestos narcotraficantes venezolanos.

Luego, ante una pregunta de si las operaciones se limitarían únicamente a Venezuela, Trump zanjó que este país “ha sido peor que la mayoría”, pero que hay otras naciones “que también envían a sus narcotraficantes” a EE.UU. 

En la misma línea, el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, afirmó este martes que su país "apenas ha comenzado" con los ataques en el Caribe y el Pacífico que apuntan contra embarcaciones supuestamente vinculadas al narcotráfico.

"Apenas hemos comenzado a atacar narcolanchas y a enviar a los narcoterroristas al fondo del océano porque han estado envenenando al pueblo estadounidense", declaró Hegseth durante la reunión de gabinete. Agregó que “tuvimos una pequeña pausa porque es difícil encontrar barcos para atacar en este momento, que es precisamente el objetivo. La disuasión tiene que ser importante”.

Petro: “Atacar nuestra soberanía es declarar la guerra”

Las declaraciones de Trump desataron una rápida reacción en Colombia: el presidente Gustavo Petro lo invitó directamente a visitar el país para mostrarle cómo se destruyen “9 laboratorios de cocaína cada día”, para que esta droga “no llegue” a Estados Unidos.

“Sin misiles he destruido en mi gobierno 18.400 laboratorios, venga conmigo y le enseño cómo se destruyen, un laboratorio cada 40 minutos, pero no amenace nuestra soberanía”, afirmó el mandatario en su cuenta de X. Después añadió: “Atacar nuestra soberanía es declarar guerra, no dañe dos siglos de relaciones diplomáticas”.

En esa línea, subrayó que “si hay un país ha ayudado a detener miles  de toneladas de cocaína para que no la consuman los norteamericanos, es Colombia”.

De manera similar, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia expresó su "profunda preocupación" y llamó a la unidad en América Latina "ante cualquier intento de intervención externa que pretenda socavar la soberanía".

"Recibimos con gran preocupación las recientes declaraciones del presidente de los Estados Unidos de América, Donald J. Trump, en las cuales sugiere la posibilidad de realizar acciones militares contra Colombia bajo el argumento del combate al narcotráfico", señaló un comunicado de la entidad. 

El ministerio reiteró el "indeclinable compromiso" de Colombia en la lucha contra el narcotráfico e hizo un llamado "urgente a la fraternidad entre América Latina y el Caribe para que como pueblos hermanos latinoamericanos prevalezca la unión ante cualquier intento de intervención externa que pretenda socavar la soberanía". 

Además, rechazó "cualquier amenaza de agresión externa que vulnere la dignidad, la integridad del territorio y la soberanía del pueblo colombiano". Por eso subrayó "la necesidad de abordar y solucionar las tensiones que el sistema de fiscalización internacional de drogas genera al relacionarse con los derechos humanos, la salud pública, el medioambiente, las cuestiones de género y la protección de poblaciones vulnerables".

Venezuela denuncia “venta forzosa” de la petrolera Citgo en EE.UU.

Ahora bien, en medio de las tensiones con Washington, Caracas denunció este martes la “venta forzosa” de la compañía petrolera Citgo, filial de la estatal venezolana PDVSA en Houston, cuya transacción fue autorizada por un tribunal de Delaware para reintegrar a los acreedores que buscaban el pago de deudas de larga data.

“La inminente venta forzosa de Citgo constituye un nuevo episodio de la agresión multiforme que se ejecuta desde los Estados Unidos contra Venezuela”, afirmó un comunicado publicado por la vicepresidenta y ministra de Petróleo, Delcy Rodríguez. De acuerdo a la funcionaria, esta venta fue “ejecutada por las autoridades” de EE.UU. “en perjuicio de los intereses de Venezuela y sus entidades” constituyendo “un vulgar y bárbaro despojo de un activo venezolano en territorio estadounidense”. También calificó el proceso de “fraudulento”. 

“El pueblo venezolano dará una lección histórica a quienes se han atrevido a robar nuestro patrimonio. ¡Prevaleceremos y se hará justicia!”, añadió la vicepresidenta.

La semana pasada, el juez de Delaware Leonard Stark autorizó la venta de PDV Holding, empresa matriz de Citgo, a una filial de Elliott Investment Management tras confirmar su oferta de 5.900 millones de dólares en una subasta organizada por el tribunal. Ahora bien, el fallo aún requiere la autorización del gobierno estadounidense.

Citgo ha sido objeto de acreedores que reclaman más de 20.000 millones de dólares en deudas pendientes que Venezuela no ha podido pagar.

Durante varios años, Citgo estuvo supervisada por una junta designada por un grupo de opositores que EE.UU. y otros gobiernos consideraban la autoridad política legítima tras las controvertidas elecciones de 2018, en la que no reconocieron el triunfo de Maduro. Sin embargo, para Caracas dicho colectivo carecía de cualquier validez. Esa alineación opositora se fracturó posteriormente en medio de una lucha interna por el poder, lo que complicó aún más la gestión de Citgo.

Ante esta situación, los abogados que representan a Venezuela, Citgo, PDV Holding y la minera Gold Reserve apelaron el lunes la decisión de Delaware, impugnando tanto la aprobación de la venta como la forma en que el tribunal manejó el proceso de subasta. Caracas mantiene que cualquier venta de Citgo o de sus empresas matrices es ilegal y promete impugnar el fallo por todas las vías legales disponibles.

El Pentágono defiende doble ataque en el Caribe

En medio del creciente escrutinio por el ataque doble contra una embarcación en el Caribe, que mató a los sobrevivientes del primer impacto, el Pentágono volvió a defender la acción, a pesar de todas las dudas que se ciernen sobre su legalidad. 

Kingsley Wilson, portavoz del Pentágono, insistió en que las operaciones fueron legales. "Son legales tanto bajo la ley estadounidense como bajo la ley internacional, con todas las acciones en cumplimiento del derecho de conflictos armados", aseguró este martes en conferencia de prensa.

“Nuestro objetivo es eliminar a los narcoterroristas y erradicar esa amenaza que envenena al pueblo estadounidense. Cada barco que atacamos salva 25.000 vidas estadounidenses. Esta es una misión crucial para proteger la patria, y nos enorgullece formar parte de ella”, afirmó.

Sin embargo, las dudas sobre la legalidad de atacar a sobrevivientes de un naufragio se han extendido en Estados Unidos. Según el Manual sobre el Derecho de la Guerra del Departamento de Defensa (2023), a los militares se les exige “negarse a cumplir órdenes que constituyan violaciones a las leyes de guerra”, incluidas aquellas órdenes “para realizar conductas claramente ilegales o que el subordinado sabe, de hecho, que son ilegales. Por ejemplo, las órdenes de disparar contra náufragos serían claramente ilegales”. Es decir, el ejemplo consignado en el manual coincide con la conducta que se habría incumplido el pasado 2 de septiembre.

En sus declaraciones este martes, Wilson también mencionó que el Departamento de Guerra tiene un plan “de contingencia” ante cualquier escenario en Venezuela, incluido si el presidente Maduro llegara a abandonar el cargo.

"El Departamento tiene un plan de contingencia para todo. Somos una organización de planificación; si algo ocurriera en cualquier parte del mundo, tenemos una respuesta preparada y preparada", declaró Wilson. 

Advertencia desde el Senado de EE.UU.

Ahora bien, desde el Senado de EE.UU. un grupo de congresistas advirtió este martes que presentará una nueva resolución para forzar un voto en el legislativo en caso de que Trump llegue a atacar Venezuela. 

“Una acción militar no autorizada contra Venezuela sería un error colosal y costoso que pondría innecesariamente en riesgo la vida de nuestros miembros del servicio”, señalaron los demócratas Tim Kaine, de Virginia; Chuck Schumer, de Nueva York; y Adam Schiff, de California, junto con el republicano Rand Paul, de Kentucky, en un comunicado conjunto.

“De ocurrir un ataque, presentaremos una Resolución de Poderes de Guerra para forzar un debate y votación en el Congreso que bloquearía el uso de fuerzas estadounidenses en hostilidades contra o dentro de Venezuela”, añadieron los legisladores.