Denuncian abusos "catastróficos" a palestinos en cárceles israelíes, mientras Tel Aviv viola tregua

Informes de la ONU y de otros organismos han denunciado torturas, aislamiento y hambruna contra prisioneros palestinos en cárceles israelíes. En medio, las fuerzas de Tel Aviv continúan demoliendo viviendas y atacando Gaza, pese al alto el fuego.

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La prisión de Ofer ha sido descrita como una “tumba iluminada” por presos liberados que denunciaron haber sufrido duras condiciones tras ser liberados

Una cárcel subterránea secreta sin luz solar, sin alimentos adecuados, y sin contacto con el exterior: allí ha confinado Israel a decenas de prisioneros palestinos que fueron detenidos en Gaza, sometidos a torturas inhumanas. Esa es la denuncia que ha hecho la relatora especial de la ONU sobre los Territorios Palestinos Ocupados, Francesca Albanese, en el marco de un informe exclusivo publicado por el medio The Guardian, que detalla los maltratos a los prisioneros. En medio, en el devastado enclave, Tel Aviv continúa lanzando bombardeos y demoliendo casas, a pesar del alto el fuego que entró en vigor el 10 de octubre. 

“Desde febrero de 2024, han surgido pruebas de maltrato y tortura a rehenes y detenidos palestinos por parte de agentes israelíes. Pero Israel permanece intocable. Tiene guardias y defensores pagados por todas partes, que ante cualquier argumento responden con un rotundo: ‘Ah, pero el 7 de octubre…’”, publicó Albanese en X. De hecho, en una declaración emitida este lunes, subrayó que Tel Aviv sigue protegido de rendir cuentas por estos crímenes.

El informe exclusivo de The Guardian reveló que Israel mantiene detenidos a decenas de palestinos de Gaza en una cárcel subterránea llamada Rakeft, donde los prisioneros son privados de la luz solar, de una alimentación adecuada y de cualquier contacto con sus familias o con el mundo exterior. 

El informe se basa en testimonios de abogados del Comité Público contra la Tortura en Israel (PCATI, por sus siglas en inglés), quienes visitaron la prisión y hablaron con dos palestinos civiles recluidos allí.

El documento también confirmó que muchos de los detenidos son civiles y que los tribunales israelíes prolongan sus detenciones en breves audiencias por videollamada sin la presencia de abogados, justificando esta práctica con la frase “hasta el final de la ‘guerra’”, en referencia a la ofensiva que Tel Aviv lanzó en octubre de 2023. 


Abusos “catastróficos” a los palestinos detenidos en la prisión de Ofer


Pero este no es un caso aislado. En el campo de Gilad, dentro de la prisión militar israelí de Ofer, cerca de la ciudad ocupada de Ramala, los detenidos palestinos enfrentan condiciones “catastróficas”.

La Comisión Palestina de Asuntos de los Detenidos informó, citando a una abogada, que entre 100 y 120 prisioneros viven allí en condiciones extremas distribuidos en tan solo 12 habitaciones del campo, aunque sin indicar si fueron arrestados en Gaza o en otro lugar.

“La administración penitenciaria castiga a los detenidos con aislamiento, palizas y descargas eléctricas”, señaló la comisión. 

La abogada además indicó que, durante una visita al campo, encontró a prisioneros esposados, con los ojos vendados y obligados a caminar con la cabeza agachada hacia el suelo.

También denunció que los detenidos sufren una grave escasez de ropa y artículos de higiene: “Las camisas y la ropa interior se cambian solo una vez por semana, mientras que los pantalones se reemplazan únicamente cuando están rotos, lo que obliga a muchos a usar el mismo par durante meses”.


Duchas frías sin jabón, toallas sucias, y dieta a base de pan y yogur


La abogada explicó que los prisioneros se duchan con agua fría fuera de sus habitaciones, utilizando detergente en lugar de champú, durante breves pausas matutinas y vespertinas que no superan los 20 minutos cada una.

En cuanto a la comida, los detenidos contaron que los alimentos suelen ser únicamente en pan y yogur, y que solo una vez por semana reciben atún o salchichas.

También enfrentan duras condiciones para dormir, ya que sus camas metálicas están cubiertas con colchones muy delgados, y cada prisionero recibe apenas una manta y una toalla que se cambian cada varias semanas, a menudo por otras sucias, según el comunicado.

Algunos detenidos, además, se ven obligados a dormir en el suelo debido a la falta de espacio en las habitaciones.

La escasez de ropa y mantas se agrava por las bajas temperaturas en el campo, que tiene ventanas con barrotes abiertos por donde entran el viento y la lluvia.


Castigos injustificados con palizas, aislamiento y descargas eléctricas


La abogada añadió que los oficiales israelíes irrumpen en las habitaciones todos los días y ejecutan medidas punitivas por razones triviales como estar de pie cerca de una ventana o rezar en grupo, y sin motivo alguno.

Además, los prisioneros son obligados a arrodillarse durante los cuatro recuentos diarios, tienen prohibido dormir después de las 6 a.m. o permanecer despiertos por la noche.

La comisión citó además los casos de Mohammad Al-Qadi y Ali Abu Atiya como ejemplos de castigos con aislamiento, golpizas o descargas eléctricas. Asimismo, hizo referencia al detenido Sheikh Jamal Al-Tawil, quien fue rociado con gas por negarse a dirigir la palabra a un agente israelí utilizando la palabra hebrea para “gracias”, reportó la agencia de noticias palestina WAFA. 

Las autoridades israelíes no han hecho comentarios sobre las declaraciones de la abogada.

Más de 10.000 palestinos, entre ellos mujeres y niños, se encuentran recluidos en prisiones israelíes, sufriendo torturas, hambre y negligencia médica que han provocado la muerte de numerosos prisioneros, según organizaciones de derechos humanos israelíes y palestinas.


Israel sigue atacando Gaza pese al alto el fuego


A pesar de la entrada en vigor del último acuerdo de alto el fuego el 10 de octubre, las fuerzas israelíes continúan con la demolición de viviendas palestinas en el barrio de Zeitoun, en el sureste de la Ciudad de Gaza, mientras lanzan intensos ataques aéreos sobre la ciudad sureña de Jan Yunis.

El ejército de Tel Aviv lleva a cabo estas demoliciones, a la vez que sus vehículos militares disparan intensamente al este de la ciudad y diversos tipos de drones sobrevuelan la parte occidental, informó WAFA.

Aviones de combate israelíes también llevan a cabo intensos bombardeos en las zonas norte y este de Jan Yunis, mientras la artillería israelí ha disparado varios proyectiles contra el área de Zanna, en el noreste de la ciudad.

Las demoliciones se realizan principalmente en la parte israelí la llamada “línea amarilla”, una división imaginaria separa las zonas actualmente ocupadas por el ejército de Tel Aviv en Gaza de aquellas de las que se retiró cuando entró en vigor la primera fase del acuerdo de alto el fuego. 

El número de muertos por ataques de Israel desde la implementación de la tregua en el enclave ha aumentado a 241, con otras 619 personas heridas, y se han recuperado 528 cuerpos. Esto eleva el balance total desde el inicio de la ofensiva genocida contra Gaza el 7 de octubre de 2023 a 69.176 fallecidos y 170.690 heridos.