8 de diciembre de 2025
La Doctrina Monroe —la política con la que EE.UU. marcó a América Latina como su “zona de influencia” desde el siglo XIX— ha vuelto oficialmente al centro de la política exterior estadounidense. Así lo reconoce la nueva Estrategia de Seguridad Nacional difundida por Washington, donde se establece el llamado “Corolario Trump”: una versión actualizada que prioriza el control geopolítico del hemisferio frente al avance de actores como China y Rusia.
En la práctica, esto ya se traduce en presión sobre países que no se alinean con Washington y respaldo a gobiernos afines. Para algunos sectores de la región, esta política abre oportunidades; para otros, revive viejos fantasmas de intervención, control militar y dependencia.

