Estados Unidos mantiene su intensa ofensiva en aguas internacionales, y en su más reciente operación este martes atacó a una embarcación en el Pacífico oriental que, afirma, supuestamente estaba vinculada al narcotráfico. La acción mató a dos muertos y mantiene elevado el nivel de tensión en la región.
En un comunicado oficial, el jefe del Pentágono, Pete Hegseth, anunció que “por orden del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el Departamento de Guerra efectuó un ataque cinético letal contra una embarcación operada por una Organización Terrorista Designada (DTO)”.
Según Hegseth, la información de inteligencia de EE.UU.indicó que la embarcación estaba involucrada en “tráfico ilícito de narcóticos, transitando por una ruta conocida de narcotráfico y transportando estupefacientes”. El funcionario añadió que ningún miembro de las fuerzas estadounidenses resultó herido en el ataque y precisó que dos hombres calificados como “narcoterroristas” murieron a bordo.
Hegseth además reiteró la postura de Washington frente a lo que ha denominado su lucha contra el narcotráfico al afirmar que “localizaremos y neutralizaremos toda embarcación que tenga la intención de traficar drogas hacia Estados Unidos para envenenar a nuestros ciudadanos. Proteger la patria es nuestra principal prioridad. Ningún terrorista de cartel tiene oportunidad frente a las fuerzas armadas estadounidenses”.
Ataques de EE.UU. han matado a 67 persona
El ataque de este martes es el más reciente de la serie de operaciones que Washington ha lanzado contra embarcaciones a las que acusa de estar vinculadas al narcotráfico. Según la Casa Blanca, estas acciones forman parte de la campaña del presidente Donald Trump para frenar el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.
Desde septiembre, las fuerzas estadounidenses han ejecutado más de 15 de operaciones similares en el Caribe y el Pacífico oriental, en las que afirman haber destruido, hasta ahora, al menos 17 naves: 16 embarcaciones y un semisumergible. El saldo es hasta el momento de al menos 67 muertos.
Sin embargo, Estados Unidos no ha presentado evidencias públicas de que los objetivos atacados estuvieran efectivamente traficando narcóticos o representaran una amenaza directa para el país.
Organizaciones de derechos humanos y expertos legales han puesto en duda la legalidad de este tipo de operativos, argumentando que los ataques contra presuntas embarcaciones de narcotráfico violan el derecho internacional. Justamente, el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Turk, calificó las acciones como “inaceptables” y pidió una investigación independiente, describiéndolas como posibles ejecuciones extrajudiciales.
Además, durante lo que ya son más de dos meses, Trump ha expandido la presencia militar estadounidense en Latinoamérica, desplegando infantes de marina, buques de guerra, aviones de combate y bombarderos, submarinos y drones. También se reporta que el portaaviones USS Gerald Ford se dirige al Caribe como parte de este despliegue.
Estas acciones militares han elevado las tensiones regionales. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro —a quien Washington acusa de narcotráfico, sin pruebas—, ha denunciado que el despliegue estadounidense es un pretexto para “imponer un cambio de régimen” en Caracas y apoderarse del petróleo venezolano.
Rubio informará al Congreso sobre los ataques a lanchas cerca de Venezuela
Mientras Washington mantiene su ofensiva, el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, informará este miércoles al Congreso, a puerta cerrada, sobre los ataques en el Caribe, cerca de Venezuela, y en Pacífico oriental, cerca de Colombia. Según confirmó la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, Rubio se reunirá con el denominado Grupo de los 12, integrado por los líderes de la mayoría republicana y la minoría demócrata en ambas cámaras, así como por miembros de los comités de inteligencia.

La oposición demócrata ha acusado al Gobierno de Donald Trump de no entregarles información suficiente sobre los operativos. Leavitt rechazó esas críticas y aseguró que la administración ha mantenido informado al Congreso. El Gobierno de Trump “ha informado al Congreso sobre estos asuntos en ocho ocasiones distintas, y los demócratas han participado en dichas reuniones. De hecho, el secretario Rubio estará mañana (miércoles) en el Capitolio para informar al Grupo de los 12, que también incluye a demócratas”, afirmó.
Además, la portavoz añadió que Trump “ha dejado muy claro que, si los senadores desean conocer las operaciones contra los narcotraficantes, pueden hacerlo”, y subrayó que la Casa Blanca está dispuesta a continuar informando. “Estamos encantados de hablar con ellos al respecto y seguiremos haciéndolo, pero hemos sido sumamente transparentes”, insistió.
Lula y el papa expresan su preocupación
En medio de las tensiones en Latinoamérica por las acciones militares de Washington, tanto el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, como el papa León XIV expresaron su condena.
Lula rechazó este martes la posibilidad de una incursión terrestre de Washington en Venezuela y reiteró su disposición a mediar entre ambos países. "No quiero que lleguemos a una invasión terrestre" por parte de las fuerzas militares de Estados Unidos, afirmó Lula en Belém durante una entrevista con agencias internacionales.
Añadió que, durante una reunión con Trump en Kuala Lumpur el mes pasado, le había señalado a su homólogo que “los problemas políticos no se resuelven con armas, se resuelven mediante el diálogo”.
Por su parte, el papa León XIV también se pronunció este martes en respuesta a una pregunta de un periodista sobre el despliegue de EE.UU. Aunque no mencionó directamente al presidente Trump, advirtió que “con la violencia no gana nadie”.
El pontífice sostuvo que un país tiene derecho a mantener fuerzas militares para defender la paz, pero señaló que, en este caso, la situación “parece un poco diferente” y “aumenta las tensiones”, en referencia a los reportes sobre barcos estadounidenses “cada vez más cerca de la costa de Venezuela”. "Con la violencia no ganamos. Lo que hay que hacer es buscar el diálogo", insistió
Horas más tarde, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, agradeció al papa León XIV por su pronunciamiento y mencionó una carta enviada al Vaticano hace un mes. “Gracias, papa León, muchas gracias”, declaró, calificando además de “gran amigo” al secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin. “Le doy las gracias a la Iglesia católica”, concluyó.
Maduro: "Soy más famoso que Taylor Swift y Bad Bunny"
En lo que pareció ser una cuota de humor en medio de las tensiones, Maduro, bromeó este martes sobre las menciones que hacen de él los medios de comunicación en Estados Unidos y dijo sentirse "más famoso" que la estrella del pop Taylor Swift y que el cantante puertorriqueño Bad Bunny en ese país.
"Uno no deja de sorprenderse. Digo soy más famoso que Taylor Swift, que Karol G, más famoso que Bad Bunny en Estados Unidos. Tengo ganas de grabar un disco, inclusive", expresó el presidente durante un congreso de la formación oficialista, transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV),
Además, afirmó que "todavía" se asombra de verse en medios estadounidenses, donde aseguró que "se creó una alarma" luego de que dijera que el pueblo del país suramericano es "un poderoso movimiento popular unido y armado en defensa de su derecho a la paz y a tener patria".










