El Ejército de Israel avanzó este lunes hacia la zona rural occidental de Daraa, en el sur de Siria, y estableció un puesto de control militar que restringió el movimiento de civiles, en lo que constituye una nueva violación a la soberanía del país, informaron medios locales.
La agencia estatal siria SANA reportó que las tropas israelíes se desplazaron al área situada entre las aldeas de Maariya y Abdin, donde instalaron un puesto de control en un cruce conocido localmente como al-Maqsam.
“Las fuerzas israelíes avanzaron al amanecer entre las dos aldeas y establecieron un puesto de control temporal en el punto de al-Maqsam, lo que generó preocupación entre los residentes y restringió el movimiento”, señaló Moaffaq Mahmoud, alcalde de Abdin y Maariya, de acuerdo a SANA.
Este nuevo avance se suma a una serie de incursiones terrestres israelíes registradas durante las últimas semanas en el oeste de Daraa, que con frecuencia están acompañadas de la instalación de puestos de control militares destinados a limitar la vida cotidiana de los residentes, según funcionarios sirios.
El pasado 6 de diciembre, la artillería israelí bombardeó una posición militar abandonada al norte de la aldea de Jamla, en la zona de la cuenca del Yarmouk, sin causar víctimas.

Al menos 43 incursiones sólo este mes
Durante este fin de semana, el ejército israelí intensificó sus incursiones terrestres en la provincia siria de Quneitra, en el suroeste del país, al ingresar a varias localidades rurales y establecer nuevos puestos de control. Así, el número total de redadas israelíes sólo este mes ascendió a 43, algunas de las cuales incluyeron arrestos, según un recuento de Anadolu.
De acuerdo a la cadena estatal Al-Ikhbariya TV, tropas israelíes entraron el sábado en la aldea de Ain Ziwan con cinco vehículos militares e instalaron un puesto de control temporal. Ese mismo día, otra unidad ingresó en la aldea de al-Ajraf, en el centro de la zona rural de Quneitra, donde desplegó cuatro vehículos y estableció un control para registrar a los transeúntes.
Por su parte, la agencia estatal SANA informó además que el domingo una patrulla israelí con dos vehículos avanzó desde el área de Adnaniyah, en el norte de Quneitra, y puso un puesto de control entre las aldeas de Rwihinah y Mushayrifah. Otra unidad se desplazó hacia la localidad sureña de al Rafid, donde realizó disparos al aire sin que se reportaran heridos, mientras una patrulla de cinco vehículos ingresó en la aldea de Saida al Hanout.
Estas incursiones se produjeron un día después de que decenas de residentes protestaran en la ciudad de al-Salam contra los continuos ataques de Israel contra civiles y propiedades. Hasta el momento, ni el ejército israelí ni las autoridades sirias han emitido comentarios oficiales sobre los hechos.
Más de 1.000 ataques y 400 incursiones en un año
Pese a que el Gobierno de Siria no representa una amenaza militar directa para Israel, las fuerzas de Tel Aviv han ingresado de forma reiterada a su territorio y han lanzado ataques aéreos que han causado la muerte de civiles y la destrucción de instalaciones militares, así como de vehículos, armas y municiones del ejército sirio.
Según datos de Damasco, desde el 8 de diciembre de 2024, cuando cayó el régimen de Bashar Al-Assad, Israel ha ejecutado más de 1.000 ataques aéreos en Siria y más de 400 incursiones transfronterizas en las provincias del sur.
En paralelo, Siria e Israel mantienen negociaciones para lograr un posible acuerdo de seguridad, aunque Damasco ha condicionado cualquier pacto al restablecimiento de la situación sobre el terreno a como estaba antes de diciembre del año pasado.
Israel ocupa la mayor parte de los Altos del Golán sirios desde 1967. Tras la caída del régimen de Al-Assad, Israel declaró el colapso del Acuerdo de Separación de Fuerzas de 1974 y amplió su ocupación al apoderarse de la zona desmilitarizada de amortiguamiento.
Autoridades y residentes sirios sostienen que estas continuas violaciones israelíes socavan los esfuerzos por restablecer la estabilidad, y obstaculizan los planes del Gobierno para atraer inversiones destinadas a mejorar las condiciones económicas del país.















