Richard Grenell, enviado especial de Washington, aseguró que mantiene diálogo con Caracas. Un anuncio que, sin embargo, contrasta con las últimas declaraciones de EE.UU., que este lunes rechazó el contenido de una carta enviada por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a su homólogo Donald Trump, que proponía un diálogo directo entre ambos países.
“Yo he estado dialogando por orden del presidente Trump. He hablado con Maduro, he ido a Venezuela y sigo hablando con su equipo”, aseguró Grenell este jueves durante el programa CBS Mornings.
La semana pasada, Grenell había defendido la necesidad de buscar un acercamiento a Venezuela. Hizo énfasis en que “la Casa Blanca dispone de diversas herramientas antes de considerar la vía militar”, pero se mostró confiado en que aún es posible “evitar una guerra”.
No obstante, en los últimos días Maduro había calificado las más recientes interacciones como “malogradas”, en un contexto de amenazas militares de Washington contra Caracas, bajo el argumento de la lucha contra el tráfico de drogas.
Por su parte, el Gobierno venezolano sostiene que la narrativa de la administración Trump se basa en falsos argumentos que vinculan a Caracas con el narcotráfico. El lunes, Maduro denunció lo que calificó como una campaña de agresión psicológica, política, diplomática y militar por parte de EE.UU., iniciada hace seis semanas. Según el mandatario, la estrategia estadounidense se sustenta en tres elementos: una narrativa falsa, una escalada de tensiones y la búsqueda de un incidente que justifique una intervención.
Todo ocurre en medio de crecientes tensiones por las operaciones militares estadounidenses en el Caribe. En agosto, Washington elevó a 50 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a la captura de Maduro, señalado de presuntos vínculos con cárteles de droga, incluido el Cartel de los Soles, acusaciones que Caracas rechaza de manera firme.
Luego, Washington desplegó ocho buques de guerra en la región bajo el argumento de combatir el narcotráfico. Recientemente, EE.UU. atacó al menos cuatro embarcaciones con un saldo de 14 muertos, argumentando que transportaban drogas. El gobierno venezolano rechazó estas acusaciones y calificó los ataques como violaciones a su soberanía, mientras la comunidad internacional observa con creciente preocupación el desarrollo de los hechos.
Simulacro nacional ante desastres y conflictos
Mientras tanto, Maduro convocó a un simulacro nacional para la “preparación del pueblo ante catástrofes naturales o cualquier conflicto armado”. La medida se anunció luego de que este miércoles por la noche el país sufriera múltiples sismos.
Varios temblores, dos de ellos de magnitud 6,2 y 6,3, sacudieron buena parte de Venezuela entre el miércoles y la madrugada del jueves y, pese a que no causaron víctimas, generaron alarma en una población poco habituada a estos fenómenos. Los temblores se sintieron sobre todo en el estado Zulia y en Caracas, donde el más intenso obligó a vecinos a salir a las calles a medianoche.
Maduro pidió que escuelas y hospitales se sumen al simulacro de preparación, “para que nos permita prepararnos para cualquier circunstancia”.