“Venezuela enfrenta una coyuntura decisiva para su existencia” y necesita de la unión nacional: esa fue la advertencia que lanzó este martes el presidente Nicolás Maduro, en una jornada de marchas contra la presión militar que Estados Unidos ha desplegado en el Caribe. “No hay excusa para nadie, sea civil, sea político, sea militar, sea policía, que nadie se excuse. ¡Prohibido fallar! La patria reclama nuestro mayor esfuerzo y sacrificio", sostuvo el mandatario en el discurso que ofreció rodeado de sus más altos funcionarios y militares.
Las protestas, que rechazaron las “amenazas imperialistas” de Washington, se produjeron un día después de que entrara en vigor la designación de “organización terrorista” para el llamado Cartel de los Soles, cuya existencia ha sido puesta en duda tanto por Caracas como por múltiples expertos e investigaciones sobre crimen organizado. Durante meses, la Casa Blanca ha insistido en vincular, sin pruebas, a Maduro con este grupo, en lo que el mismo mandatario ha calificado de invento.
El discurso del mandatario dio cierre a las marchas en las que participaron cientos de venezolanos, a quienes invitó a “estar a la altura de defender esta tierra”. Por lo que les pidió a la Fuerza Armada, a los cuerpos policiales y a los ciudadanos en general exigirse "diez veces más" para "ser capaces de defender cada palmo" del territorio "de cualquier amenaza o agresión imperialista, venga de donde venga y cuando venga".
Las palabras de Maduro fueron reforzadas posteriormente por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, quien acusó a Estados Unidos de desplegar “sus armas para la guerra”. “Bombarderos, buques, destructores, submarinos, todos equipados con misiles guiados; aviones de combate acercándose a las costas, tratando de intimidar a un pueblo”, dijo.
Por su parte, el ministro de Interior, Diosdado Cabello, afirmó que el Gobierno de Maduro, la Fuerza Armada, los organismos policiales y el pueblo están "cada día más" unidos en "un solo bloque" y con la "firme convicción y decisión" de "vivir en libertad". Según Cabello, "últimamente las amenazas del imperialismo" y de "quienes allá creen que gobiernan al mundo entero se han intensificado", con el objetivo, reiteró, de "robarse los recursos naturales" de Venezuela.

Trump vuelve a mencionar posibilidad de diálogo con Maduro
Desde Washington, el presidente de EE.UU., Donald Trump, reiteró el martes que se mantiene abierto a un diálogo con Maduro, incluso con la designación como “organización terrorista” al Cartel de los Soles. “Ya veremos, pero estamos conversando”, señaló el mandatario a la prensa, cuando se le preguntó si tiene previsto dialogar con Maduro.
Ante la duda de por qué buscaba intentar hablar con Maduro si su administración ya lo había acusado de liderar una “organización terrorista”, Trump replicó: “Si podemos salvar vidas, si podemos hacer las cosas por las buenas, está bien”. Aunque luego matizó: “Si tenemos que hacerlo por las malas, también está bien”.
Cuando los periodistas insistieron sobre cuáles serían los objetivos concretos de un eventual encuentro, el presidente sugirió que la respuesta era obvia. “Probablemente deberían saber cuál es la meta”, afirmó, antes de volver acusar a Caracas de haber generado problemas para Estados Unidos. “Han causado muchos problemas y han enviado a millones de personas a nuestro país”, aseguró.
En paralelo, ahora se espera que el secretario de Guerra de EE.UU., Pete Hegseth, llegue este miércoles a República Dominicana para una visita oficial, según informó la embajada en Santo Domingo. El lunes, el presidente dominicano Luis Abinader había revelado que Hegseth llegaría al país para, entre otros puntos, "fortalecer" los "esfuerzos conjuntos" en la lucha contra el narcotráfico. "Hemos tenido (Estados Unidos y República Dominicana) una colaboración, una lucha fuerte contra el narcotráfico en momentos en que ha aumentado la producción de cocaína en algunos países de Sudamérica", dijo el mandatario.
La visita de Hegseth se produce al otro día de que el jefe del Estado Mayor de Estados Unidos, Dan Caine, empezará este lunes una gira por el Caribe con visitas a Puerto Rico y a un buque de guerra que Washington mantiene en la región. Caine, uno de los arquitectos de la operación “Lanza del Sur” (Southern Spear, en inglés), luego llegó este martes a Trinidad y Tobago para sostener conversaciones enfocadas en el narcotráfico,
Llamado a desescalar tensiones
Mientras toda Latinoamérica sigue de cerca las tensiones entre EE.UU. y Venezuela, la Organización de los Estados Americanos (OEA) llamó a las partes a reducir el tono al advertir que la región no necesita una guerra.
Durante una conferencia de prensa virtual, el secretario general de la OEA, Albert Ramdin, señaló que apoya los esfuerzos para combatir el crimen organizado, pero insistió en que deben respetar el derecho internacional.
“No queremos ninguna guerra en nuestro hemisferio. La paz es, en última instancia, lo que todos en este hemisferio desean. Nadie gana en una guerra”, señaló Ramdin, quien agregó que “no está a favor de que ocurra ningún incidente que conduzca a la escalada de una situación bélica”.
Además, subrayó la importancia de mantener la región como una zona de paz. “Espero que ambos países, Venezuela y Estados Unidos, ejerzan moderación y aseguren que se puedan explorar otras vías diplomáticas, mediante negociaciones, para resolver sus problemas”, concluyó.
Por su parte, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, indicó que la organización monitorea la situación con “grave preocupación”. Además advirtió que “una retórica cada vez más confrontativa… podría aumentar la inquietud en la región” y subrayó la importancia de que los Estados miembros respeten el derecho internacional.

Cuba e Irán alzan la voz contra las acciones de EE.UU.
En un rechazo categórico al despliegue militar de EE.UU. en el Caribe, Cuba acusó a Washington de buscar el “derrocamiento violento” del Gobierno de Maduro.
"La exagerada y agresiva presencia militar de Estados Unidos en la región constituye una amenaza para América Latina y el Caribe en su conjunto", declaró el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, en un mensaje de video publicado en su red social X.
"Con el apoyo del secretario de Estado (Marco Rubio), el objetivo principal e inmediato es un derrocamiento violento del Gobierno de Venezuela mediante el uso de la fuerza militar estadounidense, una acción extremadamente peligrosa e irresponsable con consecuencias impredecibles", añadió.
En ese sentido, advirtió que una intervención militar en Venezuela podría provocar “un número incalculable de muertes” y crear “un escenario de violencia e inestabilidad en el hemisferio que podría ser inimaginable”.
Ahora bien, las críticas no llegaron solo desde La Habana. Irán se sumó a las advertencias y condenó la escalada militar de la Casa Blanca, denunciándola como una “actitud intimidante”.
El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Abbas Araghchi, le expresó en una llamada telefónica a su homólogo de Venezuela, Yván Gil, “la actitud intimidante de Estados Unidos hacia Venezuela”. Asimismo, criticó el “unilateralismo agresivo” de Washington, según la nota difundida por su oficina el miércoles.














