El recuento de votos comenzó el domingo por la noche en Siria tras el cierre de los colegios electorales en las primeras elecciones parlamentarias desde la caída del régimen de Bashar Al-Assad en diciembre de 2024.
"Se están contando los votos después de que cerraran los colegios electorales en todas las provincias", declaró Nawar Najmeh, portavoz del Comité Superior para las Elecciones de la Asamblea Popular, a la Agencia de Noticias Árabe Siria (SANA). La comisión electoral había extendido el horario de votación en varias ciudades importantes, incluida Damasco, para facilitar la participación.
Los sirios eligieron el domingo a dos tercios de los 210 escaños de la Asamblea Popular, mientras que un tercio de los escaños son designados directamente por el presidente. Un total de 1.578 candidatos compitieron por los escaños, con una representación femenina del 14%. Observadores de misiones diplomáticas y embajadores acreditados supervisaron la jornada desde el centro de la Biblioteca Nacional.
"Los sirios están orgullosos de presenciar su primera experiencia real en la elección de representantes para la Asamblea Popular", afirmó Mohammed Al-Ahmad, jefe del Comité Supremo de Siria para las Elecciones, en declaraciones a medios estatales. Durante la votación, el presidente de transición Ahmed Al-Sharaa visitó el centro de votación de la Biblioteca Nacional en Damasco, instando a los ciudadanos a desempeñar un papel activo en la construcción del nuevo país. Se espera que los resultados finales se anuncien entre el lunes y martes.
Desde el derrocamiento de Bashar Al-Assad, quien lideró Siria durante casi 25 años y huyó a Rusia en diciembre pasado, el nuevo gobierno ha promovido reformas políticas y económicas, reforzado la cohesión social y ampliado la cooperación con socios regionales e internacionales. La administración de transición de Ahmed Al-Sharaa asumió el poder en enero de 2025, marcando el fin del régimen del Partido Baaz, en el poder desde 1963.
Violencia en el norte: ataque del PKK/YPG
En paralelo, el grupo terrorista PKK/YPG, operando bajo el nombre de FDS, lanzó un ataque de artillería contra áreas pobladas por civiles en el norte de Siria, específicamente en las aldeas de Humayma y Al-Keyta, en la región de Deir Hafir, Alepo. El ejército sirio respondió golpeando posiciones del grupo.
El 10 de marzo, la presidencia siria había anunciado un acuerdo para integrar a las FDS en las instituciones estatales, subrayando la integridad territorial del país y rechazando cualquier agenda separatista. Sin embargo, la organización ha violado el acuerdo en varias ocasiones. Desde la caída de Bashar Al-Assad, el gobierno de transición ha reforzado las medidas de seguridad para proteger al país ante este tipo de ataques.