Venezuela llevó a cabo el sábado ejercicios militares en zonas costeras después de que Estados Unidos desplegara barcos frente a sus costas, lo que generó temores de una posible invasión.
Washington ha desplegado buques militares en el Caribe bajo el argumento de combatir el narcotráfico, atacando al menos tres embarcaciones en las últimas semanas presuntamente cargadas con drogas provenientes de Venezuela, lo que dejó 14 fallecidos.
Caracas denuncia el despliegue estadounidense, al que califica de “amenaza militar”.
Los ejercicios del sábado, realizados en el estado Falcón, al noroeste, y en el estado Sucre, al noreste, coincidieron con un simulacro ordenado por el Gobierno para prepararse ante desastres naturales.
Imágenes difundidas por la televisora estatal VTV mostraron a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) movilizando equipos militares cerca de Cabo San Román, una ciudad costera ubicada a unos 27 kilómetros al sur de Aruba.
El ejercicio incluyó disparos de cañones hacia el mar, así como el desembarco de vehículos anfibios desde una embarcación hacia tierra firme.
Camiones transportaron misiles antiaéreos Pechora de origen ruso hacia la zona.
El Ejército también llevó a cabo un ejercicio de ocupación de la Isla de Patos, un islote deshabitado cerca de la frontera con Trinidad y Tobago, en el que participaron helicópteros y paracaidistas.
Asimismo, una operación antidrogas de la FANB en Sucre movilizó a más de 5.200 efectivos, lo que resultó en 30 detenciones y la incautación de diez embarcaciones, según informó el general Domingo Hernández Lárez.
Ese mismo sábado se realizaron simulacros de emergencia en todo el país, siendo el primero un ejercicio de evacuación por terremoto, especialmente relevante tras los dos sismos superiores a magnitud 6.0 registrados en Venezuela esta semana.
