Un nuevo ataque, una nueva flotilla y el empeño por mantener el bloqueo sobre Gaza: Israel volvió a interceptar un grupo de embarcaciones que se dirigía al enclave con medicamentos y ayuda humanitaria para intentar romper el asedio que sufren los palestinos. La Coalición de la Flotilla de la Libertad informó que en la madrugada de este miércoles las fuerzas de Tel Aviv atacaron a nueve barcos de la iniciativa Thousand Madleens to Gaza en aguas internacionales, cuando se encontraban a cerca de 222 kilómetros del enclave. Una agresión que se produce menos de una semana después de que Israel detuviera la Flotilla Global Sumud, compuesta por unas 50 embarcaciones y cientos de activistas internacionales a bordo.
Un comunicado de la campaña Thousand Madleens to Gaza informó que, en el transcurso de apenas una hora este miércoles, los nueve barcos que conformaban la misión fueron atacados por el ejército israelí: Abd Elkarim Eid, Alaa Al-Najar, Anas Al-Sharif, Gaza Sunbird, Leïla Khaled, Milad, Soul of My Soul, Um Saad y Conscience. De acuerdo a los organizadores, a bordo de las embarcaciones iban unos 145 participantes.
La declaración añadió que hasta el momento “las fuentes indican que la tripulación desarmada a bordo –incluyendo médicos, periodistas y funcionarios electos– ha sido secuestrada, así como la ayuda vital, valorada en más de 110.000 dólares, de medicamentos, equipos respiratorios y suministros nutricionales destinados a los hospitales de Gaza, que sufren graves necesidades. Se desconoce su paradero”.
Por su parte, David Heap, del Comité Directivo de la Coalición del Barco Canadiense a Gaza y de la Flotilla de la Libertad, enfatizó que “Israel no tiene autoridad legal para detener a los voluntarios internacionales a bordo de estos barcos”. “Esta incautación viola flagrantemente el derecho internacional y desafía las órdenes vinculantes de la Corte Internacional de Justicia que exigen el acceso humanitario sin restricciones a Gaza. Nuestros voluntarios no están sujetos a la jurisdicción israelí y no pueden ser criminalizados por entregar ayuda o desafiar un bloqueo ilegal. Su detención es arbitraria, ilegal y debe cesar de inmediato”, añadió.
De manera similar, el Comité Internacional para Romper el Asedio a Gaza denunció en la red social X que “la ocupación israelí comete otra vez un crimen de guerra en aguas internacionales. No nos detendremos. El genocidio debe cesar y bloqueo debe romperse”.
Desde Israel, el Ministerio de Relaciones Exteriores informó en X que los barcos y los activistas estaban siendo trasladados a un puerto israelí y que “se espera su pronta deportación”.
Lo que revelaron las transmisiones en vivo
Una transmisión en vivo en YouTube de la coalición mostró el momento en que varios soldados israelíes irrumpieron en el barco Gaza Sunbird. Los organizadores añadieron que las transmisiones fueron interrumpidas y los sistemas de rastreo oficiales quedaron bloqueados, subrayando que “el ejército israelí no tiene jurisdicción legal sobre aguas internacionales” y que la flotilla “no representa ninguna amenaza”.
Las transmisiones en vivo desde la flotilla también captaron anuncios del ejército israelí advirtiendo que los barcos serían intervenidos si no se detenían. Tras las alertas, se observó a los participantes a bordo con chalecos salvavidas y sentados tranquilamente, siguiendo los protocolos de emergencia preestablecidos.
Las imágenes mostraron lanchas de la Armada de Israel rodeando los barcos, mientras se veía a los participantes arrojando sus teléfonos al mar. Durante una transmisión en vivo, desde el buque insignia de la flotilla, el Conscience, el portavoz Kasim Aktag declaró: “Los barcos nos han rodeado. Los soldados se acercan para abordar el barco. Nunca nos olviden”.
Horas antes del ataque, medios israelíes reportaron que las fuerzas del país se preparaban para interceptar a la Flotilla de la Libertad. Citando fuentes de inteligencia, el Canal 13 informó que el ejército y otras agencias del país estaban en máxima alerta, listos para un posible ataque contra la flotilla. Las fuentes le dijeron al medio que la confrontación prevista podría ser “más complicada” que la de la semana pasada con la Flotilla Global Sumud.
Desde su fundación en 2010, la Coalición de la Flotilla de la Libertad ha emprendido decenas de misiones humanitarias con el fin de entregar ayuda en Gaza y llamar la atención sobre lo que ha calificado de “bloqueo ilegal de Israel” contra el enclave.
El nuevo grupo de barcos humanitarios zarpó pocos días después de que las fuerzas navales israelíes atacaran y confiscaran más de 40 barcos de la Flotilla Global Sumud, que también navegaba hacia Gaza para romper el bloqueo, deteniendo a los más de 470 activistas a bordo, provenientes de cerca de 50 países.
Türkiye condena ataque a nueva flotilla
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Türkiye condenó firmemente la intercepción israelí contra el grupo de embarcaciones, al punto de denominarlo un “acto de vandalismo”. En un comunicado oficial señaló que la intervención contra la Flotilla de la Libertad, en la que viajaban ciudadanos y legisladores turcos, demuestra que el Gobierno de Israel, considerado "genocida", constituye una grave violación del derecho internacional y representa un nuevo ejemplo de la impunidad con la que Israel actúa en la región.
Asimismo, Ankara advirtió que al recurrir sistemáticamente a la violencia contra toda iniciativa que defienda los valores humanitarios y emplee medios pacíficos, Tel Aviv agrava las tensiones regionales y socava los esfuerzos internacionales por alcanzar una paz duradera.
Además, afirmó que se estaban tomando todas las medidas necesarias para lograr la liberación de los ciudadanos turcos. El Ministerio de Relaciones Exteriores señaló que también estaba coordinando con otros países la situación de sus ciudadanos.
Finalmente, Türkiye reiteró su compromiso firme con los palestinos y aseguró que seguirá luchando por defender sus derechos en todos los foros internacionales, así como para poner fin al genocidio en Gaza.

Israel extiende la detención de una activista española
Por otro lado, medios israelíes reportaron este martes que Tel Aviv extendió la detención de la activista española Reyes Rigo Cervilla, arrestada durante la interceptación de la Flotilla Global Sumud. “Todos los activistas de la flotilla de Gaza han sido deportados de Israel, excepto Cervilla, cuya detención se ha prorrogado por una semana”, informó la emisora pública KAN.
El medio aseguró que la activista “mordió a un dentista en la prisión de Ketziot, en el Negev”. KAN indicó que el dentista sufrió una lesión menor, fue atendido en el lugar y se llamó a la policía a la prisión para completar los procedimientos legales.
La detención de la activista había sido prolongada inicialmente hasta el miércoles, antes de que las autoridades anunciaran la extensión adicional de una semana el martes.
Entre los activistas liberados se encuentran 15 ciudadanos turcos que regresaron a su país este martes, tras haber partido desde el Aeropuerto Internacional Queen Alia en Amán, Jordania. Su vuelo aterrizó en Estambul, donde fueron recibidos por sus familias, autoridades y numerosos ciudadanos.
Activistas de la Flotilla Global Sumud denuncian torturas de Israel
Tras ser liberados, varios activistas de la Flotilla Global Sumud revelaron las condiciones a las que fueron sometidos por Israel durante su detención. En una conferencia de prensa en Estocolmo este martes, la activista Greta Thunberg declaró que ella y sus compañeros fueron “secuestrados y torturados” por las fuerzas israelíes.
Thunberg señaló que fueron forzados a permanecer en pequeñas jaulas y los amenazaron con matarlos con gas después de que pidieran solicitar atención médica. También que no tuvieron acceso a agua potable y enfermaron tras consumir agua contaminada. Sin embargo, la activista señaló que no quería compartir sus vivencias en manos de Israel, “porque esa no es la historia aquí”. "Lo que hemos vivido no es nada comparado con lo que la gente de Gaza sufre a diario", sostuvo.
Por su parte, el activista británico Aaron White, también participante de la Flotilla Global Sumud, relató su experiencia y destacó la misión humanitaria de intentar entregar ayuda a Gaza.
Hablando con la agencia de noticias Anadolu en el Aeropuerto de Estambul, tras ser enviado de regreso a Türkiye, afirmó: “Todos pusimos nuestros cuerpos en riesgo para intentar navegar, literalmente, hacia Gaza, e Israel no tiene derecho a interceptarnos ni a trasladarnos por la fuerza mientras estábamos en aguas internacionales”.
White añadió: “Israel cree que es dueño de todo (…) Dicen que son el pueblo elegido por Dios. Mi desafío a eso es que los acepto como enemigos de Dios”. También advirtió sobre el creciente sufrimiento en Gaza: “Hay niños esperando en Gaza, y chicos, chicas, hombres y mujeres, personas —incluso animales— que están siendo privados de alimento”.
Finalmente, subrayó la importancia de la acción internacional:“Si no podemos detener la máquina sionista en el corazón de Palestina, entonces no podremos liberar a los pueblos oprimidos en ninguna parte del mundo”.